De acuerdo con la información oficial del portal web de transparencia económica del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Tumbes, Cajamarca y Puno son las regiones que menos han desembolsado.
El dinero del presupuesto para inversión pública cumple un papel fundamental en la dotación de servicios y la creación de infraestructura para cerrar brechas socioeconómicas. Gracias a estos recursos, el país puede mejorar su competitividad.
Sin embargo, según cifras de Transparencia Económica, el Presupuesto Institucional Modificado (PIM) 11 de 25 gobiernos regionales ha ejecutado menos del 70% de sus presupuestos asignados para inversión pública.
San Martín acumula el mayor porcentaje de avance presupuestal, con una ejecución del 94.3%, seguido por Lambayeque con 93.3%. Mientras que en el otro extremo, Tumbes (47.5%), Puno (45.3%) y Cajamarca (45.0%) presentan las menores cifras de desembolso.
¿Cuál es el problema?
Según, Carlos Oliva, exministro de Economía, acotoó que estos ineficaces niveles de ejecución, tanto de gobiernos locales como regionales, son “un problema más estructural que particular”.
“El primer motivo es la debilidad institucional. Hay una falta de personal con conocimiento en los sistemas administrativos del Estado, los sueldos no ayudan para traer al personal más óptimo y no hay estabilidad en los equipos de trabajo», agregó.
Para, Fernando Gonzáles, economista del Instituto Peruano de Economía (IPE), se refiere al nivel de gasto de los gobiernos locales y resaltó que “el presupuesto que tienen algunos distritos excede sus capacidades de ejecución”.