Capeco alerta que los acuerdos Gobierno a Gobierno no deben sustituir la contratación pública nacional

Obreros y excavadora abren zanja en obra de infraestructura vial, proyecto ejecutado en modalidad gobierno a gobierno                     
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Guido Valdivia, Vicepresidente ejecutivo de Capeco, plantea que los acuerdos de Gobierno a Gobierno se limiten a proyectos complejos.

La Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) advirtió que los acuerdos de Gobierno a Gobierno (GtoG) deben utilizarse de manera excepcional y restringirse únicamente a proyectos de gran envergadura y alta complejidad técnica, a fin de evitar sobrecostos y debilitar el sistema nacional de contratación pública.

Así lo señaló Guido Valdivia, Vicepresidente ejecutivo de Capeco, durante la presentación del Informe Económico de la Construcción N.° 95, en el que reiteró que este tipo de mecanismos debe alinearse con el espíritu de la Ley de Contrataciones Públicas N.° 32069, que limita este tipo de convenios a proyectos cuya magnitud o especialización justifique su utilización.

“La construcción de colegios u hospitales generales no debería ejecutarse bajo este esquema, salvo que se trate de infraestructura con especialidades que no existan en el país”, enfatizó Valdivia, quien agregó que el uso indiscriminado de estos acuerdos genera un alto costo para el Estado y transmite la errónea idea de que la normativa peruana de contratación pública no funciona.

Riesgos de generalizar los acuerdos de Gobierno a Gobierno

El representante gremial explicó que el aparente éxito de algunos proyectos GtoG responde a que se aplican normas y procedimientos distintos a los nacionales, lo que no implica que sean necesariamente superiores. Por el contrario, sostuvo que el país requiere reformas profundas para fortalecer su propio sistema de contratación pública y evitar que se opte por mecanismos paralelos.

La generalización de los acuerdos de Gobierno a Gobierno se produjo durante la organización de los Juegos Panamericanos, contexto en el que su aplicación fue razonable debido a la urgencia de los plazos y la necesidad de cumplir estándares técnicos internacionales. En ese caso, el éxito no solo se debió a los modelos contractuales y herramientas de gestión empleadas, sino también a la existencia de un equipo público altamente capacitado y liderado con solvencia técnica y ética.

En contraste, señaló que uno de los principales problemas de la obra pública en el país es la debilidad estructural del cuerpo de funcionarios, muchos de los cuales carecen de capacitación continua y de respaldo institucional para tomar decisiones técnicas oportunas.



Propuestas para fortalecer la contratación pública

Ante ello, la institución propuso tres líneas de acción, orientadas a un conjunto de medidas dirigidas a mejorar la eficiencia y sostenibilidad de la inversión pública:

  1. Limitar los acuerdos de Gobierno a Gobierno a los casos estrictamente necesarios, y en su lugar, promover la participación del sector privado a través de Asociaciones Públicos-Privadas y concesiones.
  2. Incorporar instrumentos modernos de gestión y contratación en la obra pública, como Oficinas de Gestión de Proyectos (PMO), los contratos NEC (Nuevo Contrato de Ingeniería) o el uso del BIM (Modelado de información de construcción).
  3. Crear un cuerpo especializado de expertos en contratación pública nacional, capaz de conducir procesos técnicos sólidos y asegurar resultados eficientes.

Finalmente, el gremio advirtió que replicar el modelo GtoG no asegura el éxito de experiencias como la de los Panamericanos y reforzó la necesidad de fortalecer la institucionalidad nacional antes de depender de mecanismos externos.

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