Con esta herramienta contractual, ANIN entregó 64 escuelas, 5 obras de prevención y 9 centros de salud en plazos más cortos y sin paralizaciones.
Hace pocos días entró en vigor el reglamento de la nueva Ley de Contrataciones del Estado, que incorpora mecanismos orientados a una gestión más eficiente y transparente de los recursos públicos, como el uso de contratos estandarizados de ingeniería y construcción de alcance internacional y metodologías innovadoras.
La experiencia de la Autoridad Nacional de Infraestructura (ANIN), que gestiona con éxito 141 proyectos de infraestructura, ha sido determinante para la incorporación de estas herramientas en la nueva normativa, permitiendo que todas las entidades del Estado puedan aplicarlas tanto en proyectos tradicionales como en aquellos desarrollados mediante acuerdos de Gobierno a Gobierno.
Esta actualización legal permite al Estado peruano transformar sus procesos de contratación pública, impulsando mejores resultados en el desarrollo de obras y avanzando en el cierre de brechas de infraestructura en todo el país.
Con esta iniciativa, basada en las lecciones aprendidas y la experiencia internacional, ANIN reafirma su liderazgo en la transición hacia una infraestructura pública más eficiente, ágil y transparente.
ANIN y los contratos NEC
La adopción de contratos estandarizados, como los NEC (New Engineering Contract), fue uno de los pilares de la gestión de la ANIN.
Esta herramienta ha permitido entregar mejores obras en plazos más cortos y reducir la paralización de proyectos, un problema históricamente recurrente en el país. Hasta la fecha, bajo este modelo, la ANIN ha entregado 64 escuelas, 5 obras para la prevención de inundaciones y 9 establecimientos de salud.
Este enfoque innovador fue posible gracias al acompañamiento técnico del UK Delivery Team (UKDT), como parte del acuerdo G2G con el Reino Unido. Además, en marzo de este año, y con la gestión de la Embajada Británica, se logró la traducción oficial al español del contrato NEC4 ECC.
Uno de los principales logros del modelo impulsado por ANIN es la implementación de rigurosos procesos de procura que garantizan la selección transparente y eficaz de contratistas de alta calidad, asegurando así un mejor valor por el dinero público invertido. Esta experiencia de éxito ha motivado que el Estado peruano promueva su réplica en más proyectos de infraestructura a nivel nacional.