Asimismo, Capeco detalla que la comercialización de materiales de construcción irregulares supera los S/ 2,590 millones al año.
Según el Índice Global de Crimen Organizado 2023, el tráfico de productos falsificados es otro mercado criminal endémico en las Américas. Y en este sentido la puntuación promedio para América del Sur es de 6,25, colocando a la región en el segundo puesto mundial.
En este marco Perú y Paraguay tienen las máximas puntuaciones individuales de la región, considerándose puntos conflictivos para los productos falsificados. Se calcula que en Perú la actividad de falsificación mueve millones de dólares estadounidenses.
Así también, según la ALAC, señala que la falsificación, piratería y contrabando de productos falsificados representa una pérdida anual para el estado peruano de US$2,000 millones. Esta cifra debería llamar la atención de las autoridades.
Un informe de Capeco detalla que la comercialización de materiales de construcción irregulares supera los S/ 2,590 millones al año. Esto genera que los productos que compran los usuarios no cumplen con los estándares mínimos de calidad.
Para el caso de productos eléctricos, el valor de la falsificación asciende a algo más de S/ 230 millones. Esto ha provocado un gran impacto de pérdidas que se estiman en S/ 10,000 millones al año. Además, se calcula que unos S/ 70 millones es evasión fiscal, provocando más de 200 mil empleos formales perdidos anualmente.
Así concluye un informe realizado por Newfacio Comunicaciones, en base a la investigación realizada por la EPEI, que ha analizado información de proveedores y consumidores de todo el país.
El informe detalla que Capeco ha venido denunciando desde hace varios años la comercialización de materiales de construcción falsificados o de baja calidad. Entre ellos productos eléctricos, como: enchufes, tomacorrientes, luminarias, etc.
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Grave riesgo para las familias
El problema es económico y representa un serio peligro para las familias y viviendas donde son instalados dichos artículos. En efecto, el Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú ha señalado que el 70% de los incendios que se producen en las zonas urbanas del país se debe al uso de instalaciones eléctricas deficientes, principalmente por productos falsificados o que no cumplen mínimos estándares de calidad.
En tal sentido, añade el informe de la consultora de comunicación, la EPEI concluye que el uso de cables o enchufes falsificados no están preparados para soportar la demanda eléctrica del consumo de una familia. Esto puede generar sobrecargas, falsos contactos y cortocircuitos, poniendo en peligro a las personas y las vivienda.
Además, los dispositivos eléctricos falsificados o de baja calidad consumen más energía que los originales, lo que puede incrementar en más de 20% el consumo de electricidad de un hogar e impactar en mayor medida el medio ambiente.
Problema global con gran impacto en el Perú
La falsificación de productos eléctricos es un problema global. Afecta a las naciones que no controlan el ingreso ni la comercialización de productos que no cumplen las normas técnicas vigentes.
Un estudio de la OCDE y de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea estimó que el valor del comercio mundial de productos pirateados era de US$ 373.000 millones al año.
En todo este contexto, la EPEI ha venido solicitando al Estado cumplir las normas legales vigentes que prohíben la comercialización de productos eléctricos pirateados.