La soluciĂłn tĂ©cnica para la construcciĂłn de las estaciones de la LĂnea 2 del Metro de Lima que unirá el distrito de Ate Vitarte, ubicado al este de la capital, con la provincia constitucional del Callao, se viene elaborando a travĂ©s de un proceso constructivo llamado “Muro Diafragma”, una tecnologĂa poca utilizada en nuestro paĂs, pero muy requerida en otros megaproyectos a nivel mundial.
Uriel Herrera GĂłmez, gerente de proyectos de Soletanche Bachy PerĂş (SBP), empresa especialista y responsable de llevar a cabo estos trabajos en las estaciones: Municipalidad de Ate, Juan Pablo II, Insurgentes y Puerto del Callao, manifestĂł que el uso de esta tecnologĂa junto al sistema top down permite tener una estructura de contenciĂłn para hacer excavaciones verticales dentro del nĂşcleo de cada estaciĂłn.
“La ventaja es que la plataforma de trabajo puede estar al mismo nivel de una calle. Esto no impide ejecutar el muro de contención de una sola vez. Se hace por tableros, pero se puede excavar desde el nivel cero de piso hasta el nivel del fondo que indique el proyecto; que en nuestro caso ha sido desde 22 metros a 36 metros de profundidad. Después de hacerlo, se equipa con el armado de refuerzo y luego se cuela en sitio. Esto genera un gran avance en tiempos de ejecución e impacto urbano”, explicó.
Control de altos niveles freáticos en las estaciones del Callao
Detalló que con este proceso constructivo también se puede realizar la estanqueidad del “Muro Diafragma” en terrenos que presentan altos niveles freáticos de agua como ocurrió en las estaciones ubicadas en la provincia del Callao.
“Se evitará que haya ingreso de agua desde el nivel del terreno natural
hacia el interior de la estación. Con la técnica de “Muro Diafragma”, se coloca una banda de neopreno intermedia entre los tableros que conforman el muro, lo que hace que la caja sea hermética. Durante la etapa de servicio y el proceso constructivo de excavación se puede evitar que exista una entrada del agua desde el exterior al interior de la estación y por lo tanto tampoco arrastre finos que puedan crear hundimientos diferenciales en las colindancias”, recalcó el especialista.
LogĂstica fina y coordinada
Cabe precisar que la empresa también viene construyendo dos pozos de ventilación desde la estación inicial Puerto del Callao hasta la estación de Insurgentes. Este trabajo, que también usa la técnica ya mencionada, es una estructura auxiliar para maniobras o mantenimiento con acceso directo al túnel.
“La complicaciĂłn o diferencia entre una estaciĂłn y un pozo de ventilaciĂłn, es el tamaño; ya que estos Ăşltimos son de menores dimensiones que las estaciones, lo cual lleva a tener una logĂstica mucho más fina y coordinada en los tiempos de ejecuciĂłn de cada una de las partes del proceso constructivo para minimizar al máximo los impactos por interferencias entre actividades simultáneas dentro de un área reducida, tanto por temas de producciĂłn, calidad y plazo, como por seguridad”, precisĂł.
Agregó que la profundidad máxima de los muros pantalla de los pozos de ventilación que viene trabajando la firma francesa son de 36 metros, pero cada pozo es diferente de la profundidad de proyecto según los análisis y diseño del cliente.
Adelanto en el inicio de las obras civiles
El ingeniero Herrera comentĂł que la Sociedad Concesionaria Metro de Lima LĂnea 2 (propietaria del proyecto) realizĂł una acertada apuesta, ya que este procedimiento permite ejecutar las obras civiles como las losas definitivas de las estaciones a medida que se realiza la excavaciĂłn en top down, mĂ©todo que tiene como ventaja un impacto positivo en los plazos de ejecuciĂłn.
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