Puerto de Chancay promoverá reducción de hasta 20% en costo de fletes

La construcción del puerto de Chancay promoverá un mayor flujo comercial entre los puertos nacionales, lo cual podría reducir el costo de los fletes entre 4% y 20% frente a los actuales costos en el transporte terrestre, previó el director del programa especializado en derecho marítimo de la Universidad de Piura, Ernesto Calderón.

“Los costos por fletes podrían bajar si es que se generan las eficiencias necesarias. Eso significa que las embarcaciones tendrían que movilizar un volumen de carga relevante para que el impacto en el costo del flete sea notorio”, declaró.

De este modo, antes de llegar al Callao por vía terrestre trayendo los productos por enviar al extranjero, los exportadores podrían embarcar su mercadería en el puerto más cercano a la zona de producción y llevarla al puerto de Chancay, por vía marítima, para que de ahí partan a su destino final.

En ese sentido, enfatizó que el costo de transporte por vía marítima es menor al que se reporta por vía terrestre.

El Gobierno peruano firmó en mayo pasado un acuerdo para el desarrollo del terminal portuario de Chancay con la empresa china Cosco Shipping Ports Limited, lo cual considera una inversión de 3,200 millones de dólares en los próximos años.

Calderón dijo que para lograr un mayor flujo comercial entre los puertos también es necesario que sean suficientemente ágiles en la manipulación de las mercancías, reduciendo los tiempos de espera de las naves.

Considera que una fase posterior, que bien podría servir como ejemplo, sería la habilitación de instalaciones que hagan posible recibir buques que se dedican al transporte roll on-roll off (transporte de cargamento rodado, como automóviles, camiones, vehículos industriales, entre otros), de modo que sean los camiones los que sean transportados de forma masiva a las localidades litorales y después puedan terminar su trayecto.

Así, los operadores de transporte terrestre pueden extender su radio de acción. Se puede transportar un camión cargado completamente que seguirá su ruta una vez que llegue al puerto de destino.

“Si consideramos que el 90% de nuestras exportaciones se realizan por mar y que, además, la notable extensión de nuestra frontera marítima nos ubica en una posición geográfica privilegiada, resulta difícil entender cómo medidas de mejoramiento de instalaciones portuarias y medidas efectivas de potenciamiento de la navegación de cabotaje tardan tanto en aplicarse o son tan poco efectivas”, dijo.